«Mayor hijo de puta»- dice el moderado Joan Tardá sobre Peces Barba en el Twister-. Todo porque «Peces», como le llamaba otro moderado turolense de la radio, dijo preferir que los españoles nos hubiéramos quedado con Portugal en vez de con Cataluña, allá por el 1640, cuando el Conde Duque de Olivares tuvo que elegir entre a cuál de las dos revueltas independentistas se enfrentaba primero. Eligió solventar la brecha Catalana, porque la mayor parte del ejercito castellano se encontraba allí luchando contra los franceses. De esta forma perdió el control de Portugal y aunque intentó varias veces devolver a los lusitanos al redil, ya no lo conseguiría.
Hace unos meses, una encuesta realizada por la universidad de Salamanca cifraba en el 45,8% el porcentaje de portugueses que estarían a favor de unirse de nuevo a España y crear una «federación Ibérica». Quizá sean más los portugueses que desean la adhesión que los catalanes que se sienten españoles. Es curioso, ¿por qué algunos nacionalistas insultan a Peces-Barba, como si se sintieran ofendidos? ¿Acaso no hubieran preferido ellos que el grueso del ejercito del Conde se hubiera trasladado a Portugal en primer lugar? De esa manera a lo mejor sería Cataluña la independiente hoy, y Portugal en cambio una comunidad autónoma con partidos independentistas dando la lata «obrigado» en vez de «sisplao». A lo mejor, una encuesta nos diría que el 45,8% de los catalanes desearían volver a unirse a España…Y vuelta a empezar.
Por ello no puedo estar de acuerdo con Peces-Barba. Creo que nos encontraríamos exactamente en la misma situación, con un porcentaje cercano al cincuenta por ciento decidido a un bando u otro, en una coyuntura desquiciada como la actual, con la mitad de la peña deseando pertenecer a otra cosa, deseando estar en otro sitio, como el teniente Willard.
Eso ocurre cuando se crean los estados a sangre y fuego… así somos los humanos.