neolengua again (yo quiero ser insurgente)

Sí. Hay que desempolvar de nuevo al viejo Orwell, como un juguete mecánico de hojalata en un sótano mohoso; y aquella genial idea suya, la de una civilización futura en la que el poder modificara la lengua a su antojo para hacer parecer bello lo horripilante, la guerra es la paz.

Irak nos dejo multitud de términos neolinguisticos. El que más llamó la atención fue el famoso «insurgente». Un grupo armado que lucha contra los Estados Unidos no puede llamarse «rebelde». Rebelde indica oposición al poder establecido pero connota legitimidad en la lucha. En cambio insurgente es tan «cerdo», irrelevante y lánguido que dan ganas de vomitar encima del paramilitar en cuestión.

«Rebelde» es puro clasicismo, de la época en la que los jóvenes comienzan a formar un grupo social diferenciado;»insurgente» ni se sabe de dónde surge, ni tiene historia ni ha sido utilizado por nadie.

Todos los jóvenes del planeta hemos querido ser alguna vez rebeldes, y en ocasiones nos hemos saltado semáforos. No conozco a nadie que haya querido ser un insurgente.

James Dean, Marylin Monroe, Marlon Brando fueron rebeldes porque el mundo les hizo así. Nadie sabría decir si el mundo hizo al insurgente. No se conocen declaraciones de insurgentes exceptuando las de algunos cientos de barbudos canosos gritando en multitudinarios entierros polvorientos. Ningún famoso se ha declarado nunca «insurgente».

Sin embargo, al contrario de lo ocurrido en Afganistan y en Irak, resulta que  los opositores al gobierno de Gadafi son todos «rebeldes» en opinión de todos y cada uno de los medios de comunicación que uno pueda consultar, por unanimidad,  engrandeciendo la fama de independencia de la que hace gala el cuarto poder. Todos los medios han dejado de utilizar el término «insurgente» para pasar al de «rebelde». Egipcios y sirios son rebeldes; irakies y afganos «insurgentes». Inexplicable.

«Ser rebelde» es hoy un término aniñado y estúpido, musicado y partiturizado, cantado y drogado, para hijos de papá castigados sin buga el fin de semana. Insurgencia es el futuro y el presente. Insurgente es político pero no es revolucionario. Insurgente ya es un término agarrado por un Kalashnikov.